Terra incògnita: matèria d'escriptura

Trabajo presentado como apertura del espacio de Cruïlla de Recerca: Creació i Psicoanàlisi, curso 2008-09

  • Publicado en NODVS XXVI, novembre de 2008

ARRIBAR AL PROFUND

He caminat fins arribar al profund
del bosc de la paraula, per on llisquen
les aigües del silenci; m'he banyat
en la secreta gorga, ressorgint
transfigurat en la forest de símbols.
Ara vago perdut a dues llums
pel sempre clos enigma de la terra,
morós, interrogant, i creix la set
d'un mes enllà d'aquest silenci d'aigües.

Del poemari El Callat de Joan Vinyoli - 1956

1) TERRA INCÓGNITA

Lo real causa -origen- y fin de la experiencia analítica, es la tierra incógnita del psicoanálisis, aquel espacio en blanco que, en los antiguos mapas, orillaba lo desconocido.

La peste freudiana, gestada en esta brecha real, pone a luz lo imposible de simbolizar, el trauma del lenguaje que yace y acecha tras los desórdenes y la organización de la realidad. Freud señala en el ombligo del sueño, este punto anclado en lo desconocido, el vacío de la Cosa, rodeado por la insistencia de goce de la pulsión.

Lacan lo nombra: Real; y dibuja, a lo largo de su enseñanza, la topografía de lo indecible. El real, que se excluye de lo simbólico y de lo imaginario, ex-iste y me atrevería (valga el eufemismo) a decir, que también ex-siste como la "Obra" lacaniana por excelencia, la que, vinculada al goce, reordena su teoría.

Lacan mismo, durante un período, encarnó, frente a la sideración de una parte de alumnos y seguidores, el silencio de lo real, manipulando retazos de cuerda con los que hacía y deshacía formas alrededor de un agujero. Mostraba con ello, lo imposible de decir, el núcleo del enigma, la enunciación sin enunciado.

"J'ai déjà parlé jadis de l'enigme. J'ai écrit ça grand E indice petite e, Ee. Il s'agit de l'énonciation et de l'énoncé. Une énigme, comme le nom l'indique, est une énonciation telle qu'on n'en trouve pas l'énoncé." (S XXIII Le Sinthome) pág. 67.

Y Lacan concluye dicho seminario con un enunciado si bien enigmático, sugerente: "On pense contre un signifiant".

En la práctica sorprende la forma como esta parte más hermética de su enseñanza ilumina la posibilidad de una clínica apoyada en la singularidad de un goce que se repite y dibuja de forma clara, en cada caso, la espina dorsal de la dirección de la cura. Cura que concluye, dado el caso, en un punto irreductible a la palabra, un resto de materia, con el que solo cabe saber hacer obra. La obra que puede anudar el símbolo y el síntoma de tal manera que presentifique, subraye, el agujero. Punto en el que puede vincularse al saber hacer del arte. Ésta es la dirección que me posibilitó la respuesta dada al Dr. Lloret cuando, al invitarle a hablar en nuestro espacio, me preguntó qué era lo que podía aportar el psicoanálisis en la época de las neurociencias: un cierto arte de vivir, respondí.

El goce que el arte y el sinthome modulan conmemora el lugar que ha dejado vacío el objeto perdido para siempre, el lugar de la imposible representación de la Cosa, el agujero del lenguaje.

Esta conclusión parecería poder dejar cerrada la vía lacaniana, y sin embargo, algo quedó abierto que nos causa a seguir investigando, porqué el límite que lo real hace presente es, al mismo tiempo una apertura. Y ahí estamos, en el trabajo y a la espera ansiosa de la edición milleriana de los últimos seminarios de Lacan, que nos darán un apoyo sólido para esta apuesta.

2) LOS AGUJEROS NEGROS DE LA MATERIA

En el origen del término materia encontramos la palabra latina que designaba el material de que está hecha la mater, o tronco del árbol. En la actualidad se utiliza la palabra materia para designar a los materiales en su conjunto.

No hay un concepto que defina la materia. Imposible de apresar ni siquiera por una ley, que es por lo que se rige la ciencia. Todo es materia y energía, afirman los físicos. Los físicos experimentales, que son los que la han manipulado, han debido fragmentarla cada vez más en busca, sin embargo, de una ley universal, que por el momento, a pesar de su insistencia, aparece como imposible.

En el origen del universo, la expansión del espacio arrastra la llamada materia. Los griegos explicaron el universo a partir de los cuatro elementos: aire, agua, fuego y tierra. Ya Demócrito anticipa la existencia de los átomos como partículas indivisibles, base de toda materia visible. Hipótesis atómica que pudo demostrarse a finales del siglo XIX (La Tabla de Mendeliev que presenta la diversidad de átomos).

Los rayos alpha, beta y gamma mostraron que el átomo no sólo era indivisible sino que se componía de un núcleo masa- y una corteza de electrones.

La llegada de los modernos aceleradores de partículas, ahora tan de actualidad, reduce el número de partículas elementales en dos grupos principales, quarks y leptones, y así sucesivamente hasta componer el llamado modelo estándar que hasta ahora daba cuenta de lo conocido. El modelo estándar es una construcción matemática que predice cómo debe ser el mundo de las estructuras aun más pequeñas. Modelo ya cuestionado no sólo por insuficiente a la hora de abarcar las posibilidades derivadas de la existencia de materia y antimateria; de la observación de los rayos cósmicos de alta energía y de los misterios derivados de la materia oscura, sino también por temor a un límite más allá del cual el modelo deje de ser válido.

La esperanza está puesta en el funcionamiento de los nuevos aceleradores de partículas, el LHC del CERN de Ginebra, de cuya inminencia ha dado cuenta la prensa de estos días.

No obstante, no hay un referente último para el significante, ni se puede calcular todo. Desde la apuesta por el átomo , pasando por la relatividad, la mecánica quántica, la nanotecnología, las teorías de la cuerda y las supercuerdas, el telón de fondo de la búsqueda de la piedra filosofal, la TOE, la ley universal, una formulación única, se está revelando como imposible, AÚN.

Disculpad este intento de síntesis tan salvaje, dado que no encontré una mejor forma de recortar, de manera simple, un imposible para la ciencia.

3) PIÉCES DETACHÉES

La publicación de las lecciones de ese título, impartidas por Miller, en el marco de su enseñanza en el Departamento de Psicoanálisis de Paris VIII, cuya lectura propongo, permitirá introducirnos con más fundamentos en los seminarios esperados.

4) YES; WE CAN

Sí, podemos. Contando con los límites, lo que le tocará hacer a la economía de mercado. Por lo pronto Obama. Tampoco es un happy end, pero sí un alivio. Un signo de cambio: estímulo y esperanza.

 

Presentado como apertura del espacio de Cruïlla de Recerca: Creació i Psicoanàlisi, 2008-09, dedicado a MATERIA DE ESCRITURA _ REAL MATERIA Y ESCRITURA_

Magda Bosch

Terra incògnita: matèria d'escriptura

NODVS XXVI, novembre de 2008

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