Jacques-Alain Miller, El establecimiento de 'El Seminario' de Jacques Lacan
Referencia presentada en el SEMINARIO CAMPO FREUDIANO DE BARCELONA, ICF. El 12 de junio de 2010.
Reseña: Jacques-Alain Miller, El establecimiento de 'El Seminario' de Jacques Lacan.
Jacques Lacan, El Seminario libro 11 Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis.
El presente texto nos permite realizar un recorrido esclarecedor sobre el establecimiento de los Seminarios de Jacques Lacan por parte de Jacques-Alain Miller. Utilizando como guía y, desgranando paso a paso la entrevista realizada por Françoise Ansermet a Jacques-Alain Miller en 1985, el autor pone en juego una serie de elementos fundamentales a la hora de pensar qué se juega en el Establecimiento de una compleja obra oral que abarca casi tres décadas.
Jacques-Alain Miller; El establecimiento de 'El Seminario' de Jacques Lacan; François Ansermet.
"Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis" fue el primer libro publicado del Seminario de Jacques Lacan, en 1973, en vida de Lacan, nueve años después de ser dictado en 1964.
En la página 285 de su traducción al español, Jacques-Alain Miller (JAM) incluyó una "Advertencia". De ella cito el primer párrafo: "Se ha querido no contar aquí para nada y procurar, de la obra hablada de Jacques Lacan, la transcripción auténtica y que, de ahora en adelante, hará las veces del original, que no existe".
Cito, también, el tercer y último párrafo: "Lo más escabroso es el establecimiento, la invención, de una puntuación, ya que toda escansión, coma, punto, guión, punto y aparte es decisiva en lo que toca al sentido. Pero era ése el precio que había que pagar para obtener un texto legible. Según estos mismos principios se establecerá el texto de cada seminario anual".
Podemos decir que estas pocas líneas constituyen una verdadera declaración de intenciones en relación al paso, al trabajo, de la transmisión oral de los seminarios de Lacan -dictados desde 1953 hasta 1980- a la transmisión escrita de esos mismos seminarios hecha por JAM. No en vano, Lacan inicia el "Epílogo", que redactó con motivo de la publicación del Seminario, con una contundente frase: "Así se leerá, lo apuesto, este texto".1
La referencia que hoy presento: El establecimiento de 'El Seminario' de Jacques Lacan, que en su edición original francesa de 1985, se titula "Entrevista sobre El Seminario". Un joven psicoanalista suizo, François Ansermet -miembro actual de la NLS- realiza una serie de preguntas a Jacques-Alain Miller, cuatro años después de la muerte de Lacan. JAM acepta la propuesta dado su interés en ser escuchado con precisión en un tiempo en que se cuestionaba su legitimidad respecto a los derechos de hacerse cargo del establecimiento del Seminario y la "fidelidad" de lo escrito por él a lo dicho por Lacan. Es pues, también, un texto político.
Transcripción
Lacan da una definición de esta palabra en su "Epílogo" (p. 287): "lo que se lee pasa-a-través de la escritura y queda indemne".
Establecimiento de un texto, transcripción, escritura, paginación, son maneras posibles de referirse al trabajo de Miller con El Seminario de Lacan. En todo caso, establecer un texto supone una redacción particular. Así, las versiones establecidas del Seminario de Lacan son las de JAM.
Es conocido por todos que algunos grandes pensadores nunca dejaron obra escrita, fueron sus discípulos o comentaristas quienes dieron forma de escrito a las enseñanzas de aquellos, a veces con muchos años de diferencia.
Hubo muchas tentativas -en forma de resúmenes, artículos comentados etc. apoyadas en versiones estenográficas- de publicar El Seminario de Lacan. Ninguna de ellas contó con su aprobación. Él quería permanecer coherente con la enseñanza del psicoanálisis fundada en la emergencia de la verdad entre los desfiladeros de la palabra.
En 1973, Miller le propuso algo distinto: no resumir, no utilizar el contenido para hacer un artículo, no recurrir a un aparato crítico con referencias, citas, aclaración de las dificultades, sino hacer del Seminario un libro que respetase su desglose en lecciones, exhaustivo y, sin embargo, redactado. Ese sería el modelo a seguir para el conjunto del Seminario.*
Jurídicamente Miller tiene el estatuto de coautor de "El Seminario de Jacques Lacan" a pesar de que escribe "Se ha querido no contar aquí para nada…"2 en su "Advertencia"; se trata de una anulación suficiente de su particularidad para que cuando escribe yo, ese yo sea el de Lacan.
No es una tarea fácil pasar de lo oral a lo escrito
Los seminarios eran orales y tenían un grado muy importante de improvisación. Lacan no escribía sus seminarios antes de darlos; tomaba notas, pilas de notas, e inventaba, en el momento mismo, un camino utilizando ese material.
En la entrevista, Miller afirma, cito: "Decidir, restituir el sentido cuando los meandros de la expresión oral lo obliteran. Conservar o reducir términos multiplicados por el hablar es una cuestión a contemplar en cada caso particular. Desplazar un sintagma, una frase, puntuarla, hacer una relativa y otra principal, exige saber de qué se trata".3 Esa decisión está respaldada, añade, por su largo estudio de la enseñanza de Lacan y su colaboración en la edición de los libros de El Seminario que salieron en vida de Lacan.**
Antes de la impresión definitiva, Lacan leía la versión final e incluso aportaba aclaraciones a determinados pasajes opacos o nombres o referencias no recogidas en la versiones estenográficas, que constituían la materia prima.***
En el Seminario de las Psicosis, por ejemplo, aparecieron algunos pasajes con puntos suspensivos entre corchetes donde Miller no obtuvo respuesta de Lacan. Miller advierte que en los siguientes libros establecidos, podrán aparecer, cicatrices en el texto.
Lo que pasa-a-través en lo que se lee es una enseñanza o Lacan contra Lacan
Para Lacan, al igual que para Freud, la enseñanza del psicoanálisis está indisolublemente unida a la práctica.
El Seminario dictado por Lacan no es un tratado, un manual, un tutorial, un Lehrbuch, lo que se evita también en los Seminarios establecidos.
La reflexión de Lacan experimentaba transformaciones, a veces muy sutiles, en el transcurso mismo de su exposición, de una lección a otra; aparecían discrepancias, autocorrecciones, el foco de interés se desplazaba. Seguirla constituye una enseñanza.
No se trata, pues, de citar a Lacan con un valor de verdad revelada; el valor de sus formulaciones es relativo al momento de su enunciación. Por eso, cualquier intento de sistematización de su obra es ímprobo.
En la edición del Seminario, aparece la particularidad de Miller: captar la articulación lógica de la enseñanza de Lacan para restituirla en una escritura.
En este sentido, el de la articulación lógica, establecer es desembrollar. Es el paso de la palabra hablada a la letra. Aunque se conserva un cierto estilo como marca del origen oral de lo escrito.
A esa enseñanza de Lacan, tildada de oscura, Miller aporta su gusto por la claridad sin que por ello el primero quede olvidado.
El Lacan que habla, el Lacan transcrito y el Lacan que escribe
En el "Epílogo", Lacan dice: "Hablo, empero, de lo que se lee, porque lo que digo está destinado al inconsciente, o sea, a lo que se lee antes que nada".4 En esa fecha, Lacan definía al inconsciente como lo que se descifra de él.
Miller dice que Lacan era impenetrable para muchos de sus oyentes. Entre otras razones porque su reflexión estaba demasiado avanzada respecto a la comprensión de sus oyentes, también porque manejaba siempre una expresión oral muy rebuscada e inventiva hasta el punto de decir: "Hablo como otros escriben". Esto lo afirmaba para resaltar a sus oyentes que el analista obtiene su posición de la lectura.
El analista es un lector. Por esta misma razón, el Lacan escritor quería que el lector no tuviese más remedio que entrar en el texto. Así, sus escritos condensan en cada párrafo largos desarrollos de su Seminario contemporáneo.
Una vez más, los libros del Seminario establecidos por Miller, al suponer un trabajo de logificación, hacen pasar-a-través de la letra algo de lo dicho para ser leído.
Para leer a Lacan, Miller procede a la manera de Jean-François Champollion**** -el lector de la "piedra de Rosetta"-, revelando el valor de ciertas palabras y de algunas conexiones. También tiene como guía de lectura los ejes de sus escritos.
Seminarios escritos, transmisión y política institucional analítica
Lacan se sirvió de su enseñanza, también, a modo de palanca contra la IPA, institución de la que había sido apartado. Ahora, la misma IPA quiere agregarlo como uno de los grandes autores del psicoanálisis, hacerlo suyo. Pero, difícilmente puede pretender seguir a Lacan al tiempo que instaura una práctica clínica y una formación intrínsecamente incompatibles con su enseñanza.
Sin embargo, la enseñanza de Lacan, sus escritos y sus seminarios, pretendía alcanzar no sólo a la comunidad analítica tomada en su conjunto si no también al universo del pensamiento. Por eso El Seminario de Jacques Lacan es publicado sin marcas institucionales.
Fallecido Lacan, la transmisión de su enseñanza se apoya en sus textos. Requiere un trabajo de lectura, una transferencia de lectura.
Ahora bien, la transferencia con Lacan tiene un eje que es el saber, que toma cuerpo en su obra, dispuesta de tal manera que el saber conserva una dimensión de supuesto, en el lugar que ocupa la verdad está ese supuesto saber. No es un autor en posición de saber lo que dice. La división del sujeto está en primer plano. Por eso, la formación del psicoanalista precisa, además de la lectura de los textos, del paso por la experiencia del análisis personal y del control de la práctica analítica.
En la actualidad, Miller continúa sosteniendo sus funciones de depositario legal de la obra de Lacan y de responsable del establecimiento de su Seminario, al tiempo que los cursos de la Orientación lacaniana que imparte, desde hace 30 años, permiten avanzar en la dilucidación de la enseñanza de Lacan y los problemas cruciales del psicoanálisis.
Emilio Faire
Barcelona, a 6 de junio de 2010
SEMINARIO CAMPO FREUDIANO DE BARCELONA, ICF
12 de junio de 2010
Jacques Lacan, El Seminario libro 11 Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis
Reseña: Jacques-Alain Miller, El establecimiento de 'El Seminario' de Jacques Lacan. Tres Haches, BB. AA., 1999.
* Jacques-Alain Miller invita a los lectores a participar en el establecimiento del texto, enviándole observaciones e incluso correcciones (libro 17 El reverso del Psicoanálisis, Paidós, p. 231).
** Hay, sin embargo, anexos, ayudas al lector, a modo de aparato crítico. Se incluyen ponencias citadas en el Seminario: J. Lacan "Joyce el Síntoma" dictada en el Simposio Joyce en la Sorbona, la de Jacques Aubert en su intervención en El Seminario así como sus Notas de lectura sobre Ulises/Joyce e incluso un listado de nombres propios (libro 23 El sinthome, Paidós, pp. 155-244) (libro 16 De un otro al otro, Paidós, pp. 373-393)
*** En algún Seminario, estas versiones contenían anotaciones y correcciones manuscritas del propio Lacan (libro 10 La angustia, Paidós, p. 367).
**** Jean-François Champollion, 1790-1833. En 1799, un cuerpo de ingenieros del ejercito napoleónico expedicionario a Egipto, encontró en la ciudad de Rosseta, cercana a Alejandría, la conocida piedra de Rosetta, esculpida el año 196 a. C. El texto en tres tipos de escritura: jeroglífica egipcia, demótica (escritura egipcia con fines económicos y literarios) y griego; es un decreto escrito por los sacerdotes reunidos en Menfis, que conmemoraba la primera coronación del rey Ptolomeo V Epífanes, instaurando su culto en todos los templos.
Jacques-Alain Miller, El establecimiento de 'El Seminario' de Jacques Lacan
NODVS XXXII, octubre de 2010