"Punto vivo" del seminario del Campo Freudiano de febrero de 2003
Los laberintos del deseo
Reseña del comentario de Vicente Palomera de los capítulos XV, XVI, y XVII del Seminario VIII de Jacques Lacan, La transferencia, el 15.2.2003
demanda: pulsión en el inconsciente, sujeto del deseo / sujeto de la demanda, dialéctica de la castración, falo simbólico
El pasado 15 de febrero Vicente Palomera centró su comentario en los capítulos XV, XVI, y XVII que corresponden al apartado "El objeto del deseo y la dialéctica de la castración" del Seminario sobre La transferencia.
En este Seminario Lacan trata de diferenciar el sujeto del deseo del sujeto de la demanda y de cómo debe situarse el analista respecto al deseo e introduce el término de demanda para hablar de la pulsión en el inconsciente, de cómo cuerpo y lenguaje se anudan de una manera problemática y destaca que no se puede hablar de pulsión si no la articulamos con el lenguaje. En este sentido, toda necesidad, subvertida por el lenguaje, es demanda.
La referencia a Abraham y las fases de la libido sirve a Lacan, apoyándose en Freud, para oponer a la idea de desarrollo un tiempo lógico que marca la estructura. V. Palomera destaca la referencia en "De una cuestión preliminar..." de que los estadios preedípicos no son inexistentes pero son analíticamente impensables…"(p.536). El psicoanalista encuentra lo preedípico a partir de algo ya organizado a un objeto perdido. Hay una serie de objetos y esta serie esta marcada por un -φ. En esta elaboración Lacan va a intuir el objeto a.
A continuación V. Palomera comentó la lectura que hace Lacan del Complejo de castración con el cuadro de Zucchi: “Eros y Psyche", en el capítulo XVI. Historia marcada por la curiosidad de Psyche y sus efectos dañinos en Eros. En este punto Carolina Tarrida hizo un interesante comentario de la historia de "Eros y Psique" incluida en el Asno de oro de Apuleyo.
Lacan destaca que la temática de esta historia no es de una pareja, un hombre y una mujer, sino del alma y del deseo y que en el cuadro el ramo de flores esta en el lugar del sexo de Eros, el Falo desaparece, subrayando que hacer que Psyche corte el falo de Eros es un contrasentido, lo importante no es el sable sino las flores.
El Complejo de castración está vinculado a este punto de desaparición, a partir del punto de fuga del cuadro. Lo que el cuadro simboliza es que a partir del momento en que el falo es simbolizado ya está castrado, que en la medida en que se convierte en significante desaparece. La fuga de Eros representa esta desaparición del falo a causa del lenguaje. Es el significante el que castra, en la medida en que el significante separa del referente, el lenguaje entonces nos introduce en el Otro que nos separa de la Cosa.
Lacan introduce la escritura del símbolo fálico y propone escribir el hecho de que el falo como significante, no como imagen, no como órgano, es el significante de la falta de significante y propone escribir esto con φ, para indicar que este punto es un punto de negación, de separación, de fuga, de falta y propone escribirlo como -φ. De aquí el valor privilegiado que no se puede escribir sino entre paréntesis ( ).
No hay relación sexual, lo que hay es el falo que indica la falta de relación sexual. El Falo como significante permite escribir, dar la forma al agujero que hay en el lenguaje. Esta es la razón por la cual Lacan usa el término de suplencia. Hay forclusión en lo simbólico para todo sujeto y el falo es una suplencia. En la última enseñanza Lacan recurre al Φ, como función, en referencia a la función matemática, de una variable.
"Punto vivo" del seminario del Campo Freudiano de febrero de 2003
Los laberintos del deseo
NODVS VI, maig de 2003