Compartir
La clínica psicoanalítica se establece con “el saber de la transferencia” (1), es una clínica que se deduce por tanto de la experiencia, de la práctica. Lacan cuestionó la práctica de los analistas, consideraba que por estar demasiado preocupados por la realidad se orientaban por el imaginario en detrimento del simbólico que la determina. En este pasaje de lo imaginario a lo simbólico Lacan concibió la transferencia a partir de un “constituyente ternario” (2): el sujeto supuesto saber. En efecto, la suposición de saber en el Otro es una condición previa de la transferencia. Pero ¿y en los casos en los que el Otro, el sujeto supuesto saber, no cuenta o cuenta poco para el paciente? ¿Qué ocurre entonces con la transferencia? ¿Cómo producir el acto que la instituye? El deseo del analista se revela aquí crucial para causar la apertura del inconsciente.
J.-A. Miller, C.S.T (Clínica bajo Transferencia), La conversación clínica, UFORCA por la Universidad popular J. Lacan, Ed. Grama, p. 21.
J. Lacan, Proposición del 9 de octubre sobre el psicoanalista de la Escuela, Otros escritos, Paidós, p. 267.
